MADRID.- Pocas películas como “Marriage Story” han generado este año tanto acuerdo sobre su calidad, su imprescindible historia y sus fantásticas actuaciones. Quizá “Parasite”, del coreano Bong Joon-ho, sea la única capaz de plantarle cara, sin olvidar al “Joker” y a “Dolor y gloria”.
Ese ránking, avalado por la mayoría de los críticos de cine del mundo, tiene también entre las obras más destacadas de 2019 algunas cintas latinas, como “Monos” o “Las herederas”, además de la sorpresa del pasado Festival de San Sebastián, “Algunas bestias”, aún por estrenar en España.
Y entre las españolas, aparte de lo último de Pedro Almodóvar, que está por saltar todos los récords -en cuanto a nominaciones al menos- a los mejores premios y certámenes nacionales e internacionales, por primera vez se sube al trono de las destacables la ganadora del último Festival de Cine Fantástico de Sitges, “El hoyo”, dirigida por Galder Gaztelu-Urrutia.
“Marriage Story”, de Noah Baumbach, el creador de “The Squid and the Whale” (2005) -nominada al Óscar-, es de esas películas que dejan sin habla: una ruptura desgarradora contada desde el hueco que le queda al alma cuando el amor se acaba, propiedad de Netflix.
Eso sí, con permiso de “Parasite”, la sorpresa de este año elaborada la precisión de un dardo envenenado por el coreano Bong Joon-ho, Palma de Oro en Cannes, conseguida por fin tras su polémico intento en 2017 con “Okja”, primera cinta de Netflix a competición en el certamen francés junto con “The Meyerowitz Stories”, de Baumbach.
Y, aunque cada vez sea más natural introducir en las listas de lo mejor del año producciones de grandes plataformas de difusión de películas y series por internet, vuelve a ser el gigante estadounidense HBO el que se lleva la palma. Su apuesta por “The Irishman”, una superproducción de 159 millones de dólares, según la web especializada IMBD, con la poderosa reunión nada menos que de Martin Scorsese, Robert De Niro, Al Pacino y Joe Pesci, ha arrasado entre los críticos.
Si “Marriage Story” cuenta con las geniales actuaciones de Adam Driver y Scarlett Johansson, no se puede olvidar que este 2019 ha sido el año de Antonio Banderas: su impresionante retrato del director de cine Salvador Mayo (alter ego del propio Pedro Almodóvar en el pseudo-documental-ficcionado que es “Dolor y gloria”) le ha valido los premios (por fin) del Cine Europeo, de los críticos de Nueva York y Los Ángeles, Mejor Actor de Cannes…y unas veinte nominaciones, incluidas al Goya y posiblemente, al Ósar.
Pero este año la competencia en la categoría masculina es enorme de cara los Óscar, con un gran favorito, Joaquin Phoenix, tremendo en su creación del Joker en un viaje hacia el abismo de la locura con su particularísima interpretación de un personaje que parecía tener escritos, e inamovibles, los nombres de Jack Nicholson, Jared Leto o Heath Ledger.
Brad Pitt, Leonardo Di Caprio y Margot Robbie se comen la pantalla en la entretenidísima “Once Upon a time…in Hollywood”, la primera que Quentin Tarantino producía al margen de Harvey Weinstein y, según las intenciones manifestadas por el ganador de dos Óscar, la última de su carrera. Una reinvención de la historia reciente de la meca del cine, marcada por la muerte de Sharon Tate.
2019 también trajo una nueva entrega de Toy Story, la 4, tan entrañable como las anteriores; a “Hustlers” con una impagable J.Lo en el enésimo año del #MeToo, que también disfrutó a la “Captain Marvel” y a las “Booksmart” de la feminista Olivia Wilde.
Y más allá del cine de Hollywood, en este 2019 dejaron huella títulos como “Los miserables”, una historia francesa de inmigración y exclusión firmada por el debutante Ladj Ly o la romántica y feminista “Retrato de una mujer en llamas”, de Céline Sciamma.
Además de la comedia argentina “La odisea de los giles” con Ricardo Darín y Luis Brandoni a la cabeza o la delicada animación española de “Buñuel en el laberinto de las tortugas”, que cuenta el rodaje del mítico documental sobre Las Hurdes del cineasta español.
Por: Agencia EFE| Noticias SIN