Es una figura legal que permite a un condenado evitar la cárcel, siempre que cumpla una serie de condiciones impuestas por el tribunal
En medio del escándalo que rodeó al pelotero dominicano Wander Franco, surgió un término jurídico poco conocido para muchos: prisión suspendida. Aunque fue condenado por un delito grave, no pasará tiempo tras las rejas, al menos por ahora. ¿Qué significa esto y cómo funciona en el sistema judicial dominicano?
¿Qué es la prisión suspendida?
Es una figura legal que permite a un condenado evitar la cárcel, siempre que cumpla una serie de condiciones impuestas por el tribunal. No se trata de impunidad, sino de una medida que busca ofrecer una segunda oportunidad, especialmente a infractores primarios o en casos donde se consideren atenuantes.
El caso Wander Franco:
En el caso de Wander Franco, fue condenado a dos años de prisión por abuso sexual de una menor, por ello, recibió una pena suspendida.
En su caso, las condiciones incluyen:
– No acercarse a menores de edad con fines sexuales.
– Pagar una multa equivalente a diez salarios mínimos del sector público.
– No reincidir en conductas similares.
Si incumple alguna de estas reglas, deberá cumplir la sentencia en un centro penitenciario.
¿Por qué se le concedió esta medida?
El tribunal consideró factores como su edad, la presión social del caso, su falta de antecedentes penales y el impacto en su carrera profesional. Legalmente, estas razones permiten aplicar la suspensión condicional de la pena.
¿Es común esta figura en República Dominicana?
Sí. Se utiliza en casos con penas menores a cinco años y cuando el imputado representa bajo riesgo de reincidencia. Está contemplada en el Código Procesal Penal dominicano como alternativa a la prisión efectiva.
¿Cómo afectó el escandalo la carrera de Franco?
Antes del escándalo legal, Wander Franco tenía uno de los contratos más lucrativos para un jugador joven en la historia de la MLB. En noviembre de 2021, firmó una extensión con los Tampa Bay Rays por 11 años y 182 millones de dólares, con la posibilidad de alcanzar 223 millones si se cumplían ciertas metas y se ejercía una opción adicional.
Cuando en agosto de 2023 surgieron las primeras acusaciones por abuso sexual de una menor, los Rays colocaron a Franco en la lista restringida, lo que significa que no podía jugar ni entrenar con el equipo, aunque inicialmente seguía recibiendo su salario. Sin embargo, desde julio de 2024, dejó de percibir ingresos del contrato, y su estatus quedó congelado.
Además, su situación migratoria se complicó: su visa estadounidense fue revocada tras la condena, lo que le impide regresar legalmente a EE. UU. y, por tanto, continuar su carrera en la MLB. Aunque aún tiene derecho a apelar la sentencia en República Dominicana, el contrato está en pausa y los Rays podrían intentar rescindirlo invocando cláusulas de conducta.
Wander Franco con la esperanza de volver a las grandes ligas
Aunque el joven tiene esperanzas de volver a jugar en las grandes ligas, todo indica que Wander Franco seguirá restringido por la MLB y que su regreso al béisbol profesional en Estados Unidos es prácticamente inviable en este momento.
Aunque su condena fue de prisión suspendida, la MLB mantiene una investigación interna activa bajo su política de violencia doméstica, agresión sexual y abuso infantil. Esta política permite a la liga imponer sanciones disciplinarias independientemente del resultado judicial.
Además, hay un obstáculo clave: Franco perdió su visa de trabajo para EE. UU. debido a la condena, lo que le impide reportarse a los Tampa Bay Rays o a cualquier otro equipo de Grandes Ligas. Sin visa, no puede jugar, y su contrato —valorado en más de 180 millones de dólares— está congelado y podría ser rescindido por el equipo.
En resumen:
– La MLB aún no ha emitido una sanción definitiva, pero Franco sigue en la lista restringida.
– No puede ingresar a EE. UU., lo que lo deja fuera del circuito profesional.
– Su futuro en la MLB está en suspenso, y muchos analistas consideran que su carrera en Grandes Ligas podría haber terminado.
El caso Wander Franco ha reavivado el debate sobre el equilibrio entre justicia, reintegración social y tratamiento legal a figuras públicas. La prisión suspendida no borra el delito, pero plantea interrogantes sobre el perdón, la vigilancia y la responsabilidad pública de quienes viven bajo el foco mediático.
Yohanna Guzmán
