Patricia Chirinos / Por Noticias SIN
WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ordenó este martes vetar la entrada al país de su homólogo nicaragüense, Daniel Ortega, su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, y al resto de miembros de su Gobierno, tras las elecciones del 7 de noviembre en Nicaragua.
La suspensión de entrada a Estados Unidos también se aplicará a numerosos otros políticos, funcionarios y militares del país, a los que podrá restringirse la entrada si así lo considera el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.
«Los actos represivos y abusivos del Gobierno de Ortega y de aquellos que lo apoyan obligan a Estados Unidos a actuar», dijo Biden en una proclamación presidencial difundida por la Casa Blanca.
Estados Unidos ya ha impuesto en los últimos meses restricciones de visado a decenas de funcionarios, legisladores, fiscales y jueces nicaragüenses, y la orden de Biden abre la puerta a que ese tipo de sanción se extienda a prácticamente todos los niveles del movimiento oficialista en el país centroamericano.
La medida prohíbe expresamente la entrada a los «miembros del Gobierno de Nicaragua, incluidos los funcionarios electos y los miembros de sus equipos», así como los familiares directos -esposos/as e hijos/as- de todos ellos.
?@POTUS proclama restricción y suspensión de entrada al país, "como inmigrantes y no inmigrantes, a miembros del gobierno de #Nicaragua, encabezado por el presidente Daniel Ortega". Incluye alcaldes, vice alcaldes, funcionarios de seguridad, ministros, etc.
— Jorge Agobian (@JorgeAgobian) November 16, 2021
Además, se vetará la entrada a aquellos «alcaldes, vicealcaldes o secretarios políticos que planearon, ordenaron, asistieron, fueron cómplices, cometieron o participaron» en «abusos graves o violaciones de derechos humanos para castigar a manifestantes pacíficos o negar a los nicaragüenses sus libertades fundamentales».
Será Blinken quien identificará a esos funcionarios, pero el Departamento del Tesoro ya impuso el lunes sanciones financieras a los alcaldes de las ciudades de Jinotega, Esteli y Matagalpa.
También se prohibirá la entrada a los miembros de los servicios de seguridad de Nicaragua, incluidos los militares, la Policía Nacional, el directorio de Operaciones Especiales de la Policía, los grupos parapoliciales y paramilitares, además de a los funcionarios de la administración penitenciaria del país, según la proclamación.
Veto a los miembros del alto gobierno
Además, están incluidos en el veto los miembros de alto rango del sistema judicial de Nicaragua, de la oficina del fiscal público y el ministerio del Interior; los que trabajan para los ministerios gubernamentales, las agencias regulatorias, las «compañías paraestatales» y los administradores y empleados de servicios de educación superior.
El veto podría aplicarse también a personas que no trabajen para el Gobierno pero ejerzan de «agentes» o actúen en nombre de cualquiera de los sancionados para facilitar o lucrarse de actos como «el fraude electoral, los abusos de derechos humanos o la corrupción», indica el texto.
«Las acciones no democráticas y autoritarias del Gobierno de Ortega han mutilado el proceso electoral y privado a los ciudadanos nicaragüenses del derecho de elegir a sus líderes en elecciones libres y justas», afirmó Biden en la proclamación.
El gobierno de México debe romper relaciones diplomáticas con Nicaragua hasta que se restablezca la libertad y la democracia en ese país.
— Lilly Téllez (@LillyTellez) November 9, 2021
Que le quede claro al dictador Daniel Ortega: los mexicanos condenamos categóricamente su embestida contra los derechos humanos universales.
El presidente nicaragüense, Daniel Ortega, se impuso en los comicios del pasado 7 de noviembre en ausencia de oposición, después de que en los últimos meses fueran arrestados siete aspirantes a la Presidencia que se perfilaban como sus principales contendientes y tras la disolución de tres partidos políticos.