La resolución, respaldada por 14 votos a favor y una abstención, marca un momento de unidad y determinación internacional, recibiendo incluso aplausos en la sala, un acontecimiento extraordinario en este contexto.
Por: La redacción
Hoy, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas ha alcanzado un hito trascendental al aprobar, por primera vez y después de cuatro intentos previos fallidos, una resolución que insta inequívocamente a un alto el fuego en la guerra de Gaza. Esta medida urgente responde a la devastadora pérdida de vidas humanas, con un saldo de 32.000 víctimas en menos de seis meses.
La resolución, respaldada por 14 votos a favor y una abstención, marca un momento de unidad y determinación internacional, recibiendo incluso aplausos en la sala, un acontecimiento extraordinario en este contexto. En ella, se solicita un alto el fuego inmediato durante el mes de Ramadán, que culmina el 9 de abril, con miras a establecer una paz duradera. Además, se hace un llamado para la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes, sin vinculaciones.
El Consejo subraya la urgencia de ampliar la asistencia humanitaria y fortalecer la protección de los civiles en la franja de Gaza, instando a Israel a levantar todas las barreras que obstaculizan dicha ayuda. La resolución, presentada por los diez miembros no permanentes del Consejo, refleja la percepción mundial de la urgencia de la situación en Gaza, con representación de países de diversos continentes.
A pesar de la incertidumbre hasta el último momento, con solicitudes de enmienda, la resolución se mantuvo firme en su objetivo de alcanzar un alto el fuego genuino y perdurable. La guerra en Gaza ha dejado una devastación inimaginable, con más de 32.000 vidas perdidas y un millón de personas en una situación de inseguridad alimentaria extrema, equiparable al nivel de destrucción post Segunda Guerra Mundial en Alemania.