A cinco años de gestión del Partido Revolucionario Moderno (PRM) bajo el liderazgo del presidente Luis Abinader, el balance general muestra un panorama de luces y sombras, con avances importantes en algunos sectores y desafíos persistentes en otros.
Con tres años restantes en su segundo mandato, el PRM tiene la oportunidad de inclinar el balance hacia “más luces que sombras”.
El éxito dependerá de su capacidad para acelerar obras, mejorar la seguridad, reducir el endeudamiento y fortalecer la institucionalidad.