La actual primera dama, Kim Keon-hee, lidera la batalla para frenar la matanza de perros por su carne, comprometiéndose a poner fin al consumo antes de que termine el mandato del Gobierno actual. Sin embargo, la industria de carne de perro ha respondido, argumentando que prohibir el consumo basándose en la aversión de una parte de la población es una actividad política que excede la autoridad de la primera dama.
Por: Maholi Albuez
En Seúl, Corea del Sur.-Los días mas grises para los perros y gatos en Corea del Sur , mejor conocido como Boknal, que suelen caer a mediados de julio. Durante este período, ha sido una tradición macabra en algunos hogares consumir boshintang, un guiso a base de carne de perro hervida, asociado a la creencia de resistir los rigores del calor y la humedad estival. Según informes de la industria cárnica, cerca del 80% de la carne de perro en la nación asiática se consume durante el Boknal.
Aunque desde 2017 existe una ley de protección animal que clasifica a los perros como animales de compañía en Corea del Sur, no prohíbe su consumo como alimento. A pesar de que la gran mayoría de los surcoreanos no consume carne de perro, grupos animalistas estiman que hasta un millón y medio de perros se crían anualmente para este propósito.
La actual primera dama, Kim Keon-hee, lidera la batalla para frenar la matanza de perros por su carne, comprometiéndose a poner fin al consumo antes de que termine el mandato del Gobierno actual. Sin embargo, la industria de carne de perro ha respondido, argumentando que prohibir el consumo basándose en la aversión de una parte de la población es una actividad política que excede la autoridad de la primera dama.
La Humane Society International (HSI), una organización animalista, ha destacado la persistencia de la carne de perro en restaurantes, con aproximadamente 436 en Seúl. HSI ha rescatado más de 2.500 perros desde 2015, presionando a 17 granjas para que cierren. La directora de campaña de HSI en Corea, Nara Kim, destaca que la sopa de carne de perro se percibe como beneficiosa para la salud, manteniendo el cuerpo fresco en los meses calurosos.
Tanto grupos animalistas como legisladores surcoreanos respaldan la idea de promulgar una ley que prohíba el consumo de carne de perro. A medida que la propiedad de mascotas crece en el país, con alrededor del 80% de los hogares con mascotas que tienen perros, el consenso social para prohibir esta tradición se fortalece, según un informe del holding KB Financial Group.