Los diputados están trabajando a contrarreloj para aprobar la reforma del Código Penal antes del cierre de la legislatura este sábado. Aunque ya fue aprobado en primera lectura, se detectaron errores técnicos y artículos omitidos que obligan a devolver el proyecto al Senado.
Aunque el proyecto fue declarado de urgencia, los legisladores han optado por detenerse para corregir y consensuar el contenido antes de la segunda lectura. Si se aprueba, el Senado deberá validar los cambios, y el Código tendría un año de reposo antes de entrar en vigor.