La fiscal del Distrito Nacional, Rosalba Ramos, volvió a poner sobre la mesa una de las problemáticas más urgentes del país: la violencia de género. En una reciente entrevista, Ramos afirmó con firmeza que “el tema de la violencia de género es muy preocupante”, destacando el impacto devastador que tiene en las víctimas, las familias y la sociedad en general.
Ramos ha sido una voz constante en la defensa de los derechos de las mujeres y en la necesidad de fortalecer el sistema judicial para responder con eficacia a los casos de violencia intrafamiliar, feminicidios y abusos. Su enfoque combina sensibilidad social con rigor institucional, y ha insistido en que el Ministerio Público debe actuar con celeridad, protección integral y perspectiva de género.
En sus declaraciones, también ha señalado que la prevención es clave: “No podemos esperar a que ocurra una tragedia para actuar. Necesitamos educación, acompañamiento y justicia que no revictimice”. Bajo su gestión, se han impulsado campañas de concienciación, protocolos de atención y mejoras en la articulación con otras entidades del Estado.
Este llamado cobra especial relevancia en un contexto donde, según cifras oficiales, más de 60 mujeres han sido asesinadas en lo que va del año por sus parejas o exparejas, y miles de denuncias por violencia doméstica se registran cada mes.
