Este fenómeno cambia en el Caribe, no solo el clima de los países a donde se desplaza pues también, altera la salud de sus habitantes.
El polvo del Sahara es un fenómeno natural que ocurre cuando fuertes vientos en el desierto del Sahara levantan partículas diminutas de arena y minerales, que luego son transportadas por la atmósfera a través de miles de kilómetros.
Está compuesto principalmente de sílice, hierro, fósforo y arcilla.
Pero al mismo tiempo, puede contener bacterias, esporas, polen y contaminantes adheridos durante su trayecto.
Tiene un impacto notable tanto en el clima como en la salud en República Dominicana, especialmente durante los meses de verano, cuando las concentraciones suelen ser más intensas.
¿Pero cómo llega al caribe?
El polvo llega al Caribe a través de tormentas en el desierto del Sahara, en las cuales se levantan enormes cantidades de partículas de arena, que forman una Capa de Aire Sahariano (SAL) que es una masa de aire seco, caliente y cargado de polvo que se forma sobre el norte de África.
El polvo se eleva a gran altitud y se superpone al aire más frío y húmedo del Atlántico. Impulsado por sistemas de baja presión cerca de las Islas Canarias, el polvo cruza el océano y llega al Caribe, incluyendo República Dominicana, recorriendo hasta 10,000 km..
Este fenómeno cambia en el Caribe, no solo el clima de los países a donde se desplaza sino que también, altera la salud de sus habitantes.
Y el impacto en el clima es el siguiente:
– Reducción de lluvias: La masa de aire seco que acompaña al polvo inhibe la formación de nubes, lo que disminuye la probabilidad de precipitaciones.
– Aumento de temperaturas: El polvo actúa como una capa que atrapa el calor, elevando la sensación térmica y provocando días más calurosos.
– Cielos opacos y baja visibilidad: Las partículas suspendidas en el aire generan un efecto brumoso que puede durar varios días, afectando incluso la navegación aérea.
– Modificación de ecosistemas marinos: Aunque parezca contradictorio, el polvo también aporta nutrientes como hierro y fósforo al océano, lo que puede estimular el crecimiento de fitoplancton.
Entre el impacto que causa en la salud tenemos:
– Problemas respiratorios: Las partículas finas (PM10 y PM2.5) pueden penetrar profundamente en los pulmones, agravando condiciones como el asma, la bronquitis y otras enfermedades respiratorias crónicas.
– Irritación ocular y cutánea: Es común experimentar picazón en los ojos, enrojecimiento o molestias en la piel durante episodios intensos de polvo.
– Riesgo para grupos vulnerables: Niños, ancianos y personas con enfermedades cardiovasculares o inmunológicas son los más afectados y es que, la mala calidad del aire obliga al corazón a trabajar más para oxigenar el cuerpo, lo que puede descompensar a quienes ya tienen insuficiencia cardíaca o hipertensión.
– Contaminantes adheridos: El polvo puede transportar bacterias, virus, esporas de hongos, pesticidas y hasta metales pesados como mercurio.
El polvo del Sahara no solo es una molestia visual o respiratoria, para quienes ya tienen condiciones médicas delicadas, representa un riesgo real y tangible. Por eso recomendamos a las personas que tienen enfermedades cardiovasculares o inmunológicas seguir las siguientes recomendaciones:
En casa
– Mantén las ventanas cerradas para evitar que el polvo entre en tu hogar.
– Usa purificadores de aire o coloca trapos húmedos cerca de puertas y ventanas para atrapar partículas.
– Evita el uso de ventiladores que recirculen el aire del exterior.
Protección personal
– Utiliza mascarilla tipo N95 o superior si debes salir. Las quirúrgicas comunes no bloquean las partículas finas.
– Lleva gafas o anteojos protectores si tienes sensibilidad ocular.
– No realices ejercicio al aire libre, especialmente en horas de alta concentración (11 a. m. – 5 p. m.).
Cuidado del cuerpo
– Hidrátate bien para ayudar a tus vías respiratorias a mantenerse húmedas y eficaces.
– Dúchate al volver a casa para eliminar restos de polvo en piel y cabello.
– Consulta a tu médico si presentas síntomas como dificultad respiratoria, dolor en el pecho o fiebre.
Gestión de tu salud
– Ten siempre a mano tus medicamentos recetados (inhaladores, antihistamínicos, etc.).
– Revisa la calidad del aire diariamente, especialmente si tienes historial de crisis. Te puedo ayudar a seguir esos reportes, si quieres.
– Coordina con tu médico un plan de acción preventivo si sabes que se aproxima una nube de polvo sahariano.

¿Qué otro impacto tiene el Polvo del Sahara en el país?
Aunque tiene efectos negativos, el polvo sahariano también cumple funciones ecológicas importantes: fertiliza suelos en la Amazonía y alimenta ecosistemas marinos. Es un recordatorio de cómo un fenómenos naturales pueden tener impactos tanto dañinos como beneficiosos.
El polvo del Sahara nos recuerda que, aunque invisibles a simple vista, hay fuerzas que conectan continentes, modifican climas y afectan nuestras vidas. Con información, prevención y conciencia, podemos cuidar nuestra salud y adaptarnos a estos fenómenos naturales que cruzan océanos para tocar nuestro cielo.
Yohanna Guzmán