El fatídico incidente tuvo lugar el pasado viernes en una mina cercana a la aldea de Kobada, situada aproximadamente a 250 kilómetros al sur de Bamako.
Por: La redacción
Kolikouro.- En una tragedia sin precedentes, al menos 70 personas perdieron la vida tras el derrumbe de una mina artesanal de oro en la localidad de Kobadani, ubicada en la región maliense de Kolikouro. La información fue confirmada por un portavoz de la Cámara de Minas de Mali a la agencia de noticias EFE.
El fatídico incidente tuvo lugar el pasado viernes en una mina cercana a la aldea de Kobada, situada aproximadamente a 250 kilómetros al sur de Bamako. El pozo se desplomó, dejando atrapadas a decenas de personas en su interior.
Según la fuente, entre las víctimas se encuentran al menos 70 mineros, cuyos cuerpos, tanto de ciudadanos malienses como extranjeros, han comenzado a ser recuperados. Se informa que algunos de los fallecidos son originarios de Guinea Bissau, país cuya frontera se encuentra cercana a la mina.
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El portavoz señaló que este derrumbe es uno de los más mortíferos registrados en la región, donde existen numerosas minas de oro, algunas de las cuales operan de manera ilegal.
A pesar de que otras fuentes locales elevan la cifra de fallecidos a alrededor de 80 personas, el Ministerio de Minas de Mali no informó del suceso hasta el martes por la noche, emitiendo un comunicado que confirmaba «varias muertes».
De acuerdo con informantes locales, la mina había permanecido cerrada durante la temporada de lluvias entre junio y agosto, periodo en el cual se acostumbra a clausurar por razones de seguridad. En esta ocasión, a pesar de la ausencia de instrucciones gubernamentales para reabrir la mina, los mineros procedieron a explotarla de manera irregular por cuenta propia.
Se estima que entre los fallecidos hay numerosos jóvenes, según informaron diversas fuentes. En videos capturados por residentes de la zona el miércoles, se observa el trabajo de excavadoras en la mina y personas dedicadas a la recuperación de los cuerpos.
Mali, poseedor de considerables reservas de oro, ha enfrentado en diversas ocasiones la explotación irregular y sin control de sus minas artesanales. La extracción, que involucra el uso de explosivos y sustancias químicas como ácidos y cianuro, a menudo resulta en derrumbes debido a la falta de aseguramiento adecuado de los túneles.
Hasta el momento, la única comunicación oficial proviene de un comunicado emitido por el Ministerio de Minas, donde el ministro Soussourou Dembele expresa sus condolencias a las familias afectadas. Dembele asegura estar supervisando de cerca las operaciones de rescate en coordinación con los servicios de protección civil y anuncia el desplazamiento de una delegación ministerial al lugar del suceso.
El ministro hace hincapié en la importancia del respeto a las medidas de seguridad por parte de las comunidades cercanas a las minas y de los propios mineros, instándolos a trabajar exclusivamente en las áreas designadas para la extracción de oro. La comunidad internacional observa con consternación esta tragedia, mientras se espera más información sobre el incidente en desarrollo.
