Tras una noche marcada por intensos enfrentamientos entre las bandas y las fuerzas policiales, Haití parece encontrarse momentáneamente en un estado de calma.
Por: La redacción
El Colectivo de Abogados para la Defensa de los Derechos Humanos (CADDHO) ha confirmado que cerca de 3.600 presos se han fugado tras el asalto de bandas armadas a la cárcel civil de Puerto Príncipe anoche, lo que representa al menos un 97 por ciento del total de los internos, que ascendía a 3.696.
La violencia desatada por este ataque ha dejado un rastro de cadáveres esparcidos por varios puntos de la capital haitiana, incluyendo Lalue, Christ Roi y los alrededores de la Penitenciaria Nacional, donde se ha reportado un saldo de al menos diez muertos, según ha constatado EFE.
Tras una noche marcada por intensos enfrentamientos entre las bandas y las fuerzas policiales, Haití parece encontrarse momentáneamente en un estado de calma. Sin embargo, la situación sigue siendo sumamente delicada y volátil.
Las autoridades locales, en colaboración con organismos internacionales, están trabajando arduamente para contener la crisis y restaurar el orden en la zona afectada.
La fuga masiva de presos y la escalada de violencia plantean serios desafíos para la seguridad y estabilidad de Haití, en medio de un contexto político y social ya de por sí tenso.
La comunidad internacional sigue de cerca los acontecimientos en el país caribeño y está evaluando posibles acciones para brindar asistencia y apoyo en esta situación de emergencia.
Se hace un llamado a la calma y a la contención por parte de todas las partes involucradas, con el objetivo de evitar un mayor deterioro de la situación y garantizar la seguridad y el bienestar de la población haitiana.