Patricia Chirinos / Color Visión
Redacción.- Para quienes viven de los servicios sexuales en las calles de la República Dominicana, las cosas se pusieron muy duras y cambiaron radicalmente con los estragos de la pandemia, entre ellos, los recurrentes toques de queda.
Las medidas restrictivas eliminaron poco a poco la presencia discreta de las prostitutas en las noches, tanto en las calles como en clubes nocturnos.
Dado el inclemente confinamiento, la falta de ingresos abrió las puertas del ciberespacio al oficio más antiguo del mundo.
La prostitución halló un espacio efectivo en la transformación digital y pasó por completo a hacerse en la virtualidad.
La pandemia y los constantes toques golpearon con fuerza a quienes ofrecen su cuerpo en las calles de República Dominicana, dejándolos temporalmente fuera de sus negocios y sin ingresos, reseña una nota de Noticias SIN.
En un reportaje de Noticias SIN para el programa El Informe con Alicia Ortega, las trabajadoras sexuales hablan de lo que ha sido para ellas trasladar sus servicios a la web y cómo han hecho para no dejar de generar ingresos por distintas plataformas.