Michael Packard, de 56 años, estaba relajado buscando presas que acostumbra a pescar en las profundidades del océano en punta del cabo Cod, Massachusetts, EEUU, cuando fue sorprendido por un ballena jorobada que lo engulló junto a los peces, reportaron medios locales.
Packard es un conocido pescador de langostas en la costa de Cod. Todos los viernes realiza una o dos jornadas de buceo para capturar las mejores, lo que no se imaginó era que en la segunda jornada casi moriría.
¡Bendita indigestión!
El hombre contó que estaba sumergido pescando unas langostas cuando de pronto sintió un enorme empujón, seguido de una oscuridad absoluta.
Packard pensó que lo había tragado un gran tiburón blanco, pero se percató de que no era así al no tropezar con sus fauces dentadas ni sentirse herido.
«De repente sentí un enorme empujón y lo siguiente que supe es que estaba todo completamente oscuro. Podía sentir que me estaba moviendo, y también que la ballena apretaba los músculos de la boca», contó el buceador tras ser dado de alta de un hospital local.
«Estaba completamente adentro; estaba completamente oscuro. Me dije a mí mismo: ‘no hay manera de que salga de aquí. Estoy acabado, estoy muerto’. […]», resaltó el pescador.
Pero a la ballena le dio indigestión y minutos después fue ‘escupido’ por el mamífero.
Un eructo de salvación
Antes, el pescador luchó dentro de la garganta de la ballena con ayuda de su equipo de buceo. La ballena notó la presencia de Packard y comenzó a agitar su cabeza de un lado a otro.
Finalmente, salió a la superficie y ‘eructó’ al buceador.
En seguida, Packard fue auxiliado por su amigo Josiah Mayo, quien lo llevó al muelle.
Una ambulancia del Departamento de Bomberos lo trasladó a un centro médico, donde fue atendido por heridas leves en los tejidos blandos de las piernas.
Lobster diver says he was swallowed by humpback whale near Cape Cod https://t.co/9U6JUMdk81 pic.twitter.com/ZNqQjDOhBs
— New York Post (@nypost) June 11, 2021
Expertos consideran que el animal se tragó al buzo por error, ya que las ballenas jorobadas no suelen representar peligro para los humanos.
Lo que pasó es que la visión delantera del inmenso pez queda bloqueada cuando abre su boca para alimentarse.
Fuente alterna: RT