SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El presidente Medina viajará este viernes 22 de marzo a los Estados Unidos, atendiendo a una invitación del presidente estadounidense Donald Trump.
En el encuentro, se prevé discutir las prácticas económicas chinas, país con el cual República Dominicana estableció lazos diplomáticos el pasado año, y la crisis venezolana.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, recibirá este viernes en Mar-a-Lago, su mansión en Florida, a los líderes de cinco países caribeños con los que abordará, entre otros temas, la crisis en Venezuela, informó este martes la Casa Blanca.
Trump recibirá a los líderes de Bahamas, Santa Lucía, Jamaica, Haití y República Dominicana.
El mandatario estadounidense “utilizará esta reunión como una oportunidad para agradecer a estos países su apoyo a la paz y la democracia en Venezuela”.
Venezuela ha tenido cierta influencia política sobre estos países en la última década a través de la alianza Petrocaribe, con la que los cinco reciben petróleo venezolano en condiciones ventajosas.
Bahamas, Haití y República Dominicana, sin embargo, forman parte del medio centenar de países en el mundo que, liderados por EE.UU., han reconocido al líder opositor venezolano Juan Guaidó como mandatario legítimo de la nación caribeña.
Santa Lucía y Jamaica, por su lado, defienden el principio de no interferencia en Venezuela, por lo que siguen reconociendo al Gobierno de Nicolás Maduro.
Además de hablar sobre la crisis en Venezuela, Trump también quiere “fortalecer la cooperación en seguridad y enfrentar las prácticas económicas depredadoras de China”.
Asimismo, el presidente hablará sobre “oportunidades potenciales de inversión energética” en estos países, uno de los pilares de la política exterior estadounidense en la era Trump.
La reunión se producirá días después de la visita hoy del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, a la Casa Blanca, con Venezuela centrando parte de la conversación.
El encuentro entre los dos líderes ultraderechistas comenzó con una rotunda afirmación de Trump: “Creo que puedo hablar por ambos países cuando digo que todas las opciones están sobre la mesa”.
Esa referencia a la vía militar contradecía al vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourao, que en febrero dijo que esta “nunca fue una opción” para su Gobierno.
Pero Bolsonaro no descartó una posible cooperación brasileña en una hipotética intervención militar estadounidense en Venezuela, al negarse a responder una pregunta al respecto.
“Hay algunos temas que, si hablas sobre ellos, ya no son estratégicos (…). Todo lo que discutamos aquí (en privado) lo cumpliremos, pero de algunas posibilidades no se habla en público”, indicó Bolsonaro.