El Informe. Transmitido por Color visión en vivo
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Por: Luz Colmenares / Color visión
Tras la muerte de la pareja de predicadores, un ex policía narra su testimonio de corrupción.
Rubén Eladio Uceta Gómez salió de la policía hace 9 años. Pasó de ser un marino de la armada, a ser un raso en la Policía Nacional. Este hombre, en menos de 1 año dentro de las filas, se unió a la delincuencia, argumentando que un delincuente tiene mayor autoridad.
El ex policía describe que dentro de la PN, hay un importante número de oficiales que ven la corrupción como una vía de ascenso, pues existen privilegios para los policías “delincuentes” mientras que los policías “serios” no escalan posiciones con facilidad.
Basado en su experiencia, el ex policía afirma que es la policía la que refuerza el mover delincuencial en los barrios, ya sea a través del suministro de armas de fuego a los delincuentes, o la gestión de los puntos de droga y del dinero recaudado por la venta ilícita de estupefacientes. Sus anécdotas narran una organización para delinquir dentro de las mismas filas de la PN, bajo la directriz de oficiales de alto mando.
A eso le añade que hay delincuentes que son protegidos por oficiales a cambio de pagos de dinero, y en relación a ello expresa “el dinero lo mueve todo, el que tiene dinero tiene la autoridad. Si es delincuente y tienen dinero, es más que un teniente”. Esta situación, según expresa el ex policía, ata de manos y pies al oficial que está en ejercicio de su labor de cumplir la ley y proteger a la ciudadanía, pues escuda al malhechor.
Necesidad de una reforma policial
Este ex oficial de la PN sostiene que para alcanzar una verdadera reforma, lo indispensable es limpiar el alto mando; pues vanos son los esfuerzos realizados con los oficiales de menor jerarquía, si el cabecilla permanece en la institución. A su juicio, es el cabecilla quien activa estas redes delincuenciales; lo que nos lleva a pensar que son los oficiales de alto mando la clave para destruir el entramado de corrupción.
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Así mismo, menciono que dentro de la policía, existen “soluciones” para los problemas con la dirección de asuntos internos, para evitar la ejecución de sanciones correctas de acuerdo a la falta del oficial. Esto, sin lugar a dudas, perpetúa la estancia de oficiales “delincuentes” dentro de la institución.
Por otra parte, señala que los oficiales “delincuentes”, independientemente de su rango, están prestos al sicariato y a otras prácticas aun en contra de oficiales “problema” que puedan ser tropiezo en la búsqueda de beneficios personales.
Opinión acerca de la pareja cristiana acribillada
Con respecto al uso de la fuerza que acabo con la vida de una pareja cristiana el pasado 30 de marzo, Uceta Gómez apoya la idea de que el retén dispuesto en el lugar de los hechos, fue instalado bajo la dirección de un oficial de mayor rango. Añade que la respuesta de los oficiales que están siendo investigados por el doble asesinato, concuerda con mecanismos utilizados por él en el pasado.
También relata que en sus prácticas delictivas, recibía órdenes de qué hacer con el “delincuente que buscaban”. Ya fuera que lo asesinaran o lo hirieran, todo era bajo las órdenes de un oficial de mayor rango.
Su historia personal
Uceta Gómez explica que tras dos años de vida delictiva, fue capturado por las autoridades y permaneció 1 año en prisión preventiva. Cuando recibe milagrosamente la libertad, empieza a ver con otros ojos el sistema en el que estaba envuelto, y eso lo lleva a cambiar.
El ex policía hace un llamado a los oficiales al margen de la ley que aún existen en la policía para que le entreguen su vida a Dios “Esos policías que están en la delincuencia, que tienen punto y recogen dinero están a tiempo, pues si no le alcanza la ley del hombre le alcanza la ley de Dios. Están a tiempo de cambiar y entregarle su vida a Dios y de tener otra oportunidad como Dios me la dio a mí”.
Uceta Gómez aseguro que la mayoría de los oficiales que eran sus superiores, siguen activos.
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