Por: Ezequiel Abiú López
San Juan, Puerto Rico.- El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, advirtió este jueves que emprenderá acciones contra quienes protagonizaron los violentos disturbios durante la quinta jornada de manifestaciones para exigir la renuncia del ejecutivo y que dejaron varios heridos.
“Este desafío a la ley y el orden será atendido como corresponde”, indicó el gobernante en un comunicado difundido en su cuenta en Twitter.
Hasta la mañana del jueves, al menos cinco personas habían sido detenidas.
Aunque reconoció la civilidad de la mayoría de los miles de manifestantes que marcharon la víspera por el Viejo San Juan, Rosselló insistió que “otros eligieron los métodos incorrectos y de violencia”.
Aseguró que incluso algunos manifestantes usaron armas, bombas molotov y otros explosivos, “provocando heridos e impactando a oficiales de la policía”.
La protesta de la noche del miércoles, en la que participaron reconocidos cantantes como Ricky Martin, Bad Bunny y René Pérez Joglar “Residente” entre miles de manifestantes, concluyó cuando agentes policiales se enfrentaron a algunos de los asistentes y los dispersaron con gases lacrimógenos.
“Culpa de Rickyy!!!”, escribió este jueves Bad Bunny en referencia al gobernador Ricardo Rosselló. El trapero reacción de esa forma en un comentario a un video difundido en una red social en el que una persona es afectada durante la manifestación por las bombas lacrimógenas.
Los manifestantes protestaron el miércoles por quinto día consecutivo en demanda de la renuncia del gobernador tras la difusión de un chat privado en el que Rosselló y 11 de sus más cercanos colaboradores emiten insultos y se mofan de otros funcionarios, de afectados por los devastadores huracanes del 2017 y contra artistas y periodistas.
“Se mofaron de cuatro mil 600 cadáveres, de la comunidad LGBTT. Estos líderes no nos representan”, dijo el Ricky Martin durante la manifestación. “Si nuestros líderes son tan mierda, nosotros no podemos caer en esto”, insistió.
La filtración del chat, de casi 900 páginas, incendió el malestar popular luego de la revelación la semana pasada de un escándalo de corrupción que afecta a dos ex funcionarias del gobierno de Rosselló.
La ex ministra de Educación, Julia Keleher, y otra funcionaria fueron detenidas por autoridades federales de Estados Unidos por su presunta participación en el desvió de más de 15 millones de dólares.
Rosselló ha insistió que él no ha cometido ningún acto de corrupción, que no ha sido investigado por autoridades federales y que no renunciará.
“Reconozco el reto que tengo ante mí por las controversias recientes, pero creo firmemente en que es posible restaurar la confianza”, detalló el gobernante en su comunicado.
Consideró que aún es tiempo de “lograr la reconciliación” luego de “este proceso doloroso y penoso”.
En una larga conferencia de presa, Rosselló había reiterado el martes que no tiene planes de dejar su cargo.
