Por: Patricia Chirinos / Color Visión
Esta fue la mejor forma que consiguió u a mujer estadounidense para descargar su dolor y rabia contra su marido reducido a cenizas, tras tantos años de maltrato físico contra ella y sus hijos.
Según aseguró en un vídeo publicado en redes sociales, su marido la golpeó y maltrató demasiado estando vivo por lo que se lamentó de no poder tirar sus cenizas en el infierno, y ante la imposibilidad, la basura era también un mejor lugar.
«Este poquito de aquí es por todas las veces que me pateó en la cabeza. Desafortunadamente, las cenizas no se pueden arrojar directamente al infierno. Sin embargo, el basurero es la mejor opción», añadió.
Finalmente se despidió de su esposo quejándose de que le había caído ceniza en la cara: «¡Adiós amigos! ¡Uy! Está en mi cara, sucio, sucio bastardo!», dijo la mujer mientras funcia el ceño como muestra de desagrado.
El vídeo se hizo viral en cuestión de segundos y está causando controversia entre los usuarios que opinan a favor y en contra de la acción de la mujer.
La mujer identificada como Marsha Widener, contó que sufrió abusos por varios años por parte de su esposo, Donald Lee Widener, en Oklahoma, Estados Unidos.
Dijo que aunque muchos no la entenderían, pero que lo haría, se sentía en paz tirando sus cenizas a la basura.
“Paz interior, amigos. Ahora sé que no vas a entender por qué estoy haciendo esto. Este es Don Widener”, dijo la mujer mientras mostraba con sus manos la caja con las cenizas.
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Asimismo, enfatizó en que «su familia no lo quiere. Su hermano no lo quiere cerca. Sus hijos no lo quieren. Condujo un camión de basura y recogió [basura] para las empresas, ¡así que lo enviaremos de vuelta al vertedero!”, dijo Marsha.
Recalcó que lo hacía por todas las veces que le golpeó en la cabeza. “Esto es por toda la confusión y todo el dolor que ha causado a mis hijos, y a mí misma, y a sus padres. ¡Uy! Está entrando en mi cara, ¡sucio bastardo! ¡sucio bastardo!”, dijo la mujer.
La explicación de Marsha causó furor en redes sociales y ha generado múltiples reacciones. Cientos de opiniones de apoyo y otras de reflexión sobre la decisión que tomó viralizaron el vídeo.