ESTADOS UNIDOS.- “Para mí ahora mismo lo más preocupante es la salud de David, que gracias a Dios está estable”, así se expresó el segunda base de los Mets de Nueva York, Robinson Canó, sobre el atentando en contra del ex pelotero David Ortiz, quien fue herido de bala en un centro de diversión en la avenida Venezuela en Santo Domingo Este, el domingo.
Canó, de 36 años, pidió a Dios por la pronta recuperación del ex pelotero. “Mis oraciones no solamente para él, sino para su familia completa”, expresó el jugador de los Mets.
Afirmó que sintió “una pena muy grande” al recibir la noticia.
“No lo creía a lo primero”, asimismo dijo sentir alivio al ver que los informes indican que Ortiz se recuperará.
El domingo por la noche, Ortiz fue baleado por las espalda en el lugar ya mencionado. Durante una operación de varias horas en la clínica Abel Gonzalez, tuvieron que extirparle partes del hígado, colon e intestino delgado, además de la vesícula. Luego de recibir el visto bueno de los médicos para viajar, Ortiz fue trasladado a un hospital de Boston el lunes en una ambulancia aérea proporcionada por los Medias Rojas.
Ortiz, de 43 años, se retiró como jugador de Grandes Ligas después de la campaña del 2016. Canó cuenta: “(Es) alguien que siempre me ha aconsejado, aunque fuimos grandes rivales entre Yankees-Boston”, dijo Canó acerca de Ortiz. “Siempre es alguien que estuvo ahí para mí. Todavía hablamos”.
El ataque contra el ex Medias Rojas de Boston está en manos de las autoridades dominicanas. De su parte, aunque Canó expresó “No quiero ser uno de los que haga una opinión sin saber la circunstancia, la situación”, manifestó — considera que tanto él como los demás dominicanos de Grandes Ligas deben tener precaución cuando regresan a la isla.
“Todos nosotros acostumbramos a ir a sentarnos por ahí a compartir con nuestros amigos y familiares”, dijo Canó. “Ahora todos tenemos que andar con cuidado”.
