El «Fondo de Desarrollo de Infraestructuras» contará con la participación del Estado, representado por el Ministerio de la Presidencia, como fideicomitente y fideicomisario, junto a la Fiduciaria Reservas en calidad de fiduciaria.
Por: Maholi Albuez
Santo Domingo. – El presidente Luis Abinader anunció ayer el decreto 581-23, dando vida al «Fondo de Desarrollo de Infraestructuras», al adoptar la propuesta de la Comisión Revisora de Contratos del Consejo Estatal del Azúcar (CEA). Esta recomendó la formación de un fideicomiso público para gestionar los terrenos del CEA.
Según la orden ejecutiva, el traspaso de los terrenos al fideicomiso público requerirá la aprobación del Congreso Nacional, cumpliendo con la Ley 28-23 sobre Fideicomisos Públicos.
Un análisis detallado de los terrenos del CEA, afectados por ventas irregulares, respalda la recomendación de la comisión. El «Fondo de Desarrollo de Infraestructuras» se presenta como un fideicomiso público para el desarrollo inmobiliario, la gestión, inversión y fuente de pago, centrado en infraestructuras nacionales clave.
El fideicomiso tiene como objetivo la administración de terrenos identificados por el Estado, canalizando recursos obtenidos de ventas y arrendamientos para financiar el desarrollo de infraestructuras en diversos sectores como transporte, viviendas, agua y proyectos socioeconómicos de gran impacto.
El «Fondo de Desarrollo de Infraestructuras» contará con la participación del Estado, representado por el Ministerio de la Presidencia, como fideicomitente y fideicomisario, junto a la Fiduciaria Reservas en calidad de fiduciaria, según lo establecido en el decreto.
La medida subraya que buscar el crecimiento económico, la generación de empleo y mejorar las condiciones de vida de la población son objetivos de interés público y social, respaldando así la creación de este fondo para impulsar el desarrollo nacional.
