Estamos en un momento de mirar mucho hacia afuera y hace falta volver a casa, volver al interior.
Por Hermes Gudiño / Color Visión
Los seres humanos en su mayoría tenemos cada día una vida muy rápida, complicada y enfocada a la rapidez y al hacer, olvidándonos de nuestro ser, de nuestra vida interior y por eso cada día nos conocemos menos.
En este sentido existen 2 vidas, la real y la que nos imaginamos podría pasar en cada situación que afrontamos. Con base a la opinión de Marián Rojas Estape, Psiquiatra, escritora y conferencista internacional, el 90% de las cosas que nos imaginamos nunca suceden, pero el efecto en la generación de Cortisol causado por los pensamientos es igual que si la situación se presentara en la realidad.
Esto nos demuestra como nuestros pensamientos están afectando nuestra salud tanto física como emocionalmente.
Otra práctica común es la de pensar y actuar en todas las situaciones de la vida, si profundizamos esta manera de actuar es apropiada para las cosas triviales de la vida, por ejemplo se dañó la nevera de la casa, pienso quien la podría arreglar y actuó llamando al técnico y de esa forma resuelvo la situación.
Pero para las cosas profundas de la vida, tales como, la muerte de un familiar, la adicción de un ser querido, las decisiones de otros, una enfermedad, todas estas situaciones necesitan su tiempo, su proceso, por lo que pensar y actuar no resuelven nada ,más bien agrava, tanto para nosotros como para el tercero, por lo que las debemos sustituir por aceptación y contemplación.
La aceptación facilita la flexibilidad y adaptación ante la realidad, para que puedas seguir avanzando en tu camino con mayor bienestar emocional y la contemplación nos permite ver y estar presente con todo el amor del mundo para respetar la situación y estar allí pleno ,para lo que cuando nos lo requieran poder apoyar.
Todas estas reflexiones nos llevan por el camino de aquietar nuestra mente para lograr un mayor bienestar en la vida y una de las prácticas que pueden contribuir a este logro, entre otras, es la meditación.
La meditación puede producir un estado de relajamiento profundo y una mente tranquila.
Durante la meditación, concentras tu atención y eliminas el flujo de pensamientos confusos que pueden estar llenando tu mente y provocándote estrés.
Este proceso puede resultar en un realce del bienestar físico y emocional. La meditación es una forma de enseñarle a tu mente a pensar lo correcto. Es un viaje hacia adentro de uno mismo para experimentar la tranquilidad del alma.
Es una práctica que nos permite aquietar la mente en cualquier momento y de esa manera podemos estar nutridos y fortalecidos por nuestra propia paz interior, quietud y silencio.
A continuación compartiremos frases poderosas relacionada con la meditación
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