VLADIVOSTOK, Rusia.- Las conversaciones que mantuvieron hoy primero a solas y posteriormente junto a sus respectivas delegaciones el presidente de Rusia, Vladímir Putin y el líder norcoreano, Kim Jong-un, en Vladivostok han terminado.
El primer cara a cara entre ambos líderes duró aproximadamente una hora y media, en tanto que la reunión en formato ampliado, en presencia de ministros de varias carteras, se prolongó una hora y cuarenta minutos, según fuentes rusas.
Tras las conversaciones formales, Putin ofreció una cena a Kim y su delegación, cuyo menú incluye platos rusos tradicionales a petición del líder norcoreano.
El presidente ruso propuso un brindis para fortalecer la amistad y la cooperación entre la Federación de Rusia y Corea del Norte, y ambos levantaron copas de vino blanco, según fuentes locales.
Adelantó que las conversaciones se celebraron en un ambiente “constructivo, profesional y amistoso”.
No se prevé que los dos líderes hagan declaraciones conjuntas una vez concluida la recepción, pero sí que Putin exponga sus impresiones y conclusiones de la cumbre, que se celebró en uno de los complejos del campus de la Universidad Federal del Lejano Oriente, en la isla Russki, de Vladivostok.
Los principales temas en la agenda de la cumbre fueron la búsqueda de vías para hallar una solución pacífica al problema nuclear en la península coreana y para fomentar los esfuerzos de distensión entre las dos coreas, así como las relaciones bilaterales y la cooperación para garantizar la seguridad en el noreste asiático.
El presidente ruso ya adelantó a las dos delegaciones tras su primer encuentro bilateral con Kim que la conversación fue “sustancial”, palabra que luego repitió también el líder norcoreano.
“Hemos hablado, por supuesto, de la situación en la península coreana. Intercambiamos opiniones sobre lo que hay que hacer para que la situación tenga perspectivas de mejora”, dijo Putin, quien afirmó que los dos también abordaron la historia de las relaciones entre ambos países y los planes de desarrollo de la cooperación bilateral.
Por su parte, Kim aseguró que había venido a Vladivostok a tratar “las vías para el arreglo pacífico” del conflicto nuclear en la península coreana, que, en su opinión, despierta un “interés prioritario” en el mundo.
Kim calificó asimismo de “muy sustancial” la reunión a solas con el jefe del Kremlin.
El representante ruso ante la Unión Europea (UE), Vladímir Chízhov, desveló que ambos mandatarios habían abordado una eventual reanudación del diálogo a seis bandas (las dos Coreas, Japón, EEUU, Rusia y China) para el arreglo del conflicto nuclear y que se celebraron entre 2003 y 2009.
La cumbre de Vladivostok se celebró después del fracaso de la última cita entre Kim y el presidente de EEUU, Donald Trump, celebrada en febrero pasado en la capital de Vietnam, Hanói.