Las fiestas decembrinas están cargadas de emociones, que tienen un efecto depresivo en muchas personas. A este estado de ánimo negativo y temporal, se le conoce como depresión blanca o blues de Navidad.
Este tipo de depresión es inducida por el ambiente que reina en el mes de diciembre: decoración, música, reuniones; los comerciales emitidos por los medios de comunicación. Las excesivas compras de la época y la poca disponibilidad de dinero para cubrir las necesidades de consumo.
También surge debido a que la persona inmersa en la depresión blanca, tiene una concepción idealizada de la Navidad o constantemente evoca los recuerdos de su infancia, vinculados con esta época del año.
Los síntomas de la depresión blanca, son los mismos que manifiestan los pacientes con trastorno depresivo. Aflora un estado de gran tristeza, insomnio, ansiedad, falta de apetito y mal humor, entre otros síntomas.
¿Los has experimentado? Entonces descubre las claves para no caer en la depresión blanca blues de Navidad, derivada de las emociones que forman parte de las fiestas decembrinas.
Pon en práctica estos 5 claves y mantén lejos la nostalgia en Navidad:
1. No altere demasiado sus rutinas. Estudios indican que una buena estrategia para alejar la depresión navideña, es evitar cambiar demasiado las rutinas que ejecutamos de manera habitual. Por ejemplo, si haces ejercicios no pares en el mes de diciembre.
2. No exageres tus expectativas respecto a las fiestas. Las fiestas decembrinas son un proceso de festejo y regocijo. Pero también generan estrés, gastos excepcionales y otras situaciones de índole negativo. Así deben ser asumidas. Es un error pensar que podemos recrear las navidades de nuestra infancia, cuando nuestros padres hacían todo por nosotros y recreaban navidades idílicas.
3. Mantén a raya los conflictos familiares. Por lo general en Navidad toda la familia se reúne. Dada esta situación es factible que ocurran desencuentros. Si eso llegará a pasar, lo mejor sería plantear la posibilidad de hablar del tema en otro momento.
Evitar conversaciones polémicas también ayudará.
4. Convéncete: la perfección no existe. Querer que nuestras celebraciones decembrinas sean perfectas, es una fuente de depresión. Hay que simplificar la vida, poner los pies en la tierra; esto se traduce en evitar los preparativos excesivamente rigurosos y enrevesados. Lo sencillo, lo simple es bello en sí mismo.
5. Descansa suficiente. En diciembre los compromisos con familiares y amigos son múltiples; sentimos que el tiempo no alcanza para todo lo que queremos hacer y eso nos hace caer en desesperación y evita que descansemos lo necesario.
La falta reposo está vinculada a la depresión navideña, por eso debes asegurarte en lo posible de dormir lo suficiente.
¿Te gustan estos consejos? Esperamos que te ayuden a alejarte de la depresión. Ponlos en práctica y cuéntanos cómo te fue.
